No hay manera que la izquierda - a la que considero pertenezco- se entere. Que no hay forma. Siguen erre que erre con el Sector Audiovisual y la RTVA, como si fueran dos cosas antagónicas.
Ayer leí declaraciones en las que de nuevo - una vez mas- se desprecia a la producción ajena y lo que ésta representa en la economía andaluza, la cultura y la proyección estatal e internacional de Andalucía.
No podemos quedarnos anclados en aquello de los “pata negra” porque , además que no representaban a la mayoría del sector -afortunadamente- ya no son una realidad – excepto contadas excepciones como las que ocupan el horario casi al completo de la cadena perjudicando a todo el resto. Nada más. Por eso el discurso de la izquierda y el sector audiovisual hay que actualizarlo y limpiarlo de los clichés de hace décadas.
Y ni se deben, ni se pueden enfrentar a los trabajadores públicos con los privados que son igualmente trabajadores. ¿O pertenecen mas a la clase trabajadora unos que otros? Y no sólo a los trabajadores por cuenta ajena sino al tanto por ciento -que son la mayor parte del sector- de trabajadores autónomos y pymes. No podemos decir que estamos apoyando a las pymes andaluzas y hacer declaraciones como las de ayer sin aclarar lo que hay que aclarar y conocer.
En Andalucía hay 300 empresas – pymes- que intentan salir como pueden- no sólo del horror que ha dejado la todavía no pasada crisis, sino que, a pesar de ella, han seguido levantando al sector y atravesando los malos tiempos haciendo un gran esfuerzo.
Se sigue ignorando que avalan con sus casas – que son las de sus hijos e hijas y que casi se la juegan en muchos proyectos. Sin contar las noches en vela y el trabajo de 18 horas diarias para poder pagar los créditos.
A grosso modo podemos contabilizar a 1500 trabajadores y 100 millones de euros de facturación entre todas las que siguen apostando por el riesgo de producir. Y una larga y magnifica lista de actrices y actores andaluces a los que la industria audiovisual andaluza y la producción ajena, en muchos casos, ha puesto en el candelero estatal.
A esto hay que añadir el negocio inducido de turismo, hostelería y toda clase de oficios relacionados con la construcción de escenografías, de vestuario, de atrezzos … etc. Un sector que no solo mueve euros y significa riqueza para Andalucía sino que , además, aporta difusión, conocimiento, historia, cultura… que es riqueza inmaterial.
Por cada euro que recibimos se devuelve a la sociedad en salarios, gastos e impuestos casi 5 euros.
No es justo, ni corresponde a la verdad el calificativo de “pata negra” con el que se conoce al sector audiovisual externo a Canal Sur Televisión. Meter a todo un sector en el mismo saco y enfrentarlo a los trabajadores públicos de la cadena no hace ningún bien ni es inteligente. Ni hay trabajadores audiovisuales de primera ni de segunda, o, en todo caso, serán de primera los que tienen asegurado su sueldo en la RTVA mes tras mes lo que no sucede en la producción ajena.
Basta ya de reproducir discursos manidos que no corresponden a la verdad. Se lo digo a mis compañeros de coalición, a los que deben cambiar el discurso y a los que invito a consultar con quienes estamos en la misma senda y dispuestas siempre a informar desde dentro y desde el conocimiento y la experiencia para que las cosas cambien.
Urge una reunión con los representantes del sector.