28 enero 2014

Carlos Cano y el mástil huérfano. 28 de Enero 2014


Aquí acudimos hoy los andalucistas para conmemorar el nacimiento de un andaluz, de un artista:  Carlos Cano.
Decía Carlos que él entró en la reivindicación de su pueblo a través de la cultura. Añadía que no tenía ni idea de política y sin embargo hizo más por la conciencia de este pueblo que muchos políticos juntos porque penetra en él a través de la verdad y de la emoción. Desde la sensibilidad del arte se llega siempre a través de la percepción del dolor de tu gente , un dolor que no podemos arrancar de nuestro interior nunca por eso nuestra lucha es constante y va más allá del hecho político.
Por esta lucha estamos hoy de nuevo aquí los andalucistas, en la Avda que lleva el nombre del padre de la Patria Andaluza: Blas Infante, sobre esta glorieta de Carlos Cano donde sólo hay un mástil vacío. Glorietas y mástiles sin banderas andaluzas por toda Sevilla, por toda Andalucía.  Pero ni a este alcalde ni a los anteriores se les cae la cara de vergüenza ante los mástiles huérfanos de la verde y blanca. Es inadmisible que en la ciudad andaluza que acoge al Parlamento Andaluz no ondee la arbonaida… nunca les importaron los símbolos andaluces a los que se ganan el sueldo dentro del Parlamento de Andalucía, ironías del destino que le llaman.
 Hace unos días el tercer presidente del Gobierno Andaluz :  Jose Rodríguez de la Borbolla afirmó que Andalucía no era una comunidad histórica que solo era una región “diga lo que diga el Estatuto” apuntillaba…. “diga lo que diga el Estatuto”: ese es el respeto que tienen los que han gobernado Andalucía por el Estatuto; ese es el respeto que tienen a un 4 de diciembre en el que los andaluces lucharon por su autonomía como ningún otro pueblo del estado español y se la ganaron a pulso.
Nos roban la conciencia día a día , nos niegan como pueblo día a día, nos insultan día a día, subimos el porcentaje de paro día a día, nos desahucian día a día, nos ningunean día a día … ¿Qué nos pasa a los andaluces? ¿Dónde estamos? ¿Por qué miramos para otro lado? ¿Eso es lo que le vamos a enseñar a nuestros hijos, a mirar para otro lado mientras nos van borrando?
Blas Infante decía que somos hombres y mujeres de luz…  pero ¿dónde están esos hombres y mujeres de luz si nos tienen metidos en sótanos? Somos el sótano del Estado Español con el permiso del gobierno andaluz y cuando en esos sótanos nos encienden una cerilla, una linterna o, en el mejor de los casos, una bombilla agradecemos y aplaudimos como un pueblo sumiso que agradece un mendrugo de luz mientras nos están quitando el sol que nos corresponde. 
Muchas veces pienso que tenemos el síndrome de Estocolmo:  nos identificamos con nuestros secuestradores, con los secuestradores de nuestra historia, nuestros símbolos y nuestro futuro como pueblo libre y soberano.
 Hay una letra flamenca que dice:
“Desgraciaito el que come el pan por manita ajena siempre mirando a la cara si la ponen mala o buena”
Decía Carlos Cano que no tenemos capacidad de reacción  y contentos con nuestros señores somos una bicoca para el poder de turno. Y es eso lo que somos y si no nos gusta escucharlo tendremos que cambiar el rumbo.
Confundimos ser pacíficos con ser pasivos y no es la misma cosa. Ser pacíficos es voluntad de solucionar nuestros conflictos sin violencia y ser pasivos y sumisos es agachar tanto la cabeza que enseñamos otras partes de nuestro cuerpo para que hagan lo que quieran.
Yo no quiero ver a este pueblo de hombres y mujeres de luz con la cabeza agachada, rendido, conformista. No quiero encontrarme, como decía Carlos “a mi pueblo con las mismas heridas de siempre, con su collar de corazones rotos, de horizontes perdidos, sin golondrinas y sin balcones”.
Yo quiero balcones abiertos a la luz y al canto de las golondrinas, quiero que salgamos de los sótanos,  quiero que comamos nuestro pan conseguido con nuestras propias manos y recursos, quiero que aprendamos a curar nuestras viejas heridas,  que no rompan nuestros corazones y quiero horizontes de luz que vayan desde Almería hasta Cádiz , horizontes de futuro andaluz sólido para mi tierra y para mi gente.
Por eso, como decía Carlos, tenemos que levantar nuestra bandera pronunciando el hermoso nombre de nuestra tierra y por nuestra tierra, por su gente, por nuestra historia robada, por nuestros horizontes de luz y por todos los que lucharon y lucharán, no abandonemos nunca este camino de lucha, no nos rindamos ante nada nunca y no sintamos complejos ante las siglas gigantes levantadas con el clientelismo y el engaño. Somos nacionalistas andaluces y le hablamos de tu a tu a cualquier comunidad histórica, somos la civilización más antigua de Occidente, somos un pueblo, tenemos que ser un pueblo.
VIVA ANDALUCÍA LIBRE!!