17 marzo 2015

Los enterradores y el Ave Fénix



Palas y picos  junto a otras herramientas inmateriales están siempre dispuestas, año tras año – y van ya casi 50-  para cavar esa fosa en la que el deseado “cadáver” sea enterrado.  Pero oye, que no hay forma. ¿Qué tendrá la tan traída y llevada criatura que no hay quien la mate? Y  mira que tiran a dar… pues nada, que no, con las ganitas que tienen algunos de enterrarla. ¿Será que está hecha de algún material que los enterradores desconocen porque no es materia usual en ellos? ¿Será que hay algún ingrediente en la dieta que ayuda a resistir y resistir y resistir  -endeble muchas veces, con apariencia de abatida la criatura… ¡Ahora, ahora - dicen los enterradores-!  Y cuando ya están las palas y los picos en alto de nuevo, para - por fin- dejarla bajo tierra… oye que no hay forma, joder, de nuevo parece que se recupera, qué fastidio.
Y con esto de los enterradores se me viene a la cabeza el Ave Fenix, esa figura mitológica de la que decían que sus lágrimas eran curativas… y me pregunto ¿será por eso que no hay quien mate a la criatura en cuestión? Lágrimas me consta que ha derramado y el dolor nos suele hacer más fuertes a todos… y sigo el hilo de mis pensamientos intentando descubrir el secreto. Pensando, pensando, se me ocurre imaginar que por fin consiguieran enterrar al deseado cadáver.  ¡Lo hemos conseguido!! Gritarían todos dándose unas manos que nunca se dieron con el muerto en vida. ¿Qué pasaría después? ¿Dormirían los enterradores más tranquilos? ¿Serían más felices? ¿Se reconciliarían con sus parejas? ¿Brincarían de contentos el resto de sus vidas? ¿Se acabarían sus problemas? ¿Tan importante es el deseado cadáver para que haya tanto enterrador esperando? ¿No se cuenta por ahí que es una criatura enclenque? Entonces ¿Por qué tanto enterrador para algo tan enclenque?  No me cuadra. No me cuadra. Y sigo intentando averiguar por qué tanta  inquina con “tan poquito”. Ah… mira… pero ¿ese no era parte de la criatura? Si, si, me contestan. ¿Y lo que tiene en la mano no es también una pala? Si, si, me vuelven a contestar ¿y por qué quiere enterrarla? Silencio.
Dicen que el Ave Fenix tenía la capacidad de renacer de sus cenizas pero las cenizas llegaban cada 500 años así que echando cuentas, como la criatura  tiene 50 aún faltan 450 más. No creo que haya enterrador actual que viva para verlo, siento darles ese disgusto. Hay una diferencia digna de destacar entre el Ave Fenix y nuestra criatura:  el color de las alas.  El mitológico cuentan que tenía las alas de color fuego, rojizas con  unos amarillos resplandecientes… reflejos del sol.  Las de nuestra criatura las tiene verde y blancas. Por lo demás, habrá que esperar 450 años. Consuélense… seguirá habiendo enterradores y , quizás, dentro de 450 años lo consigan. Pero no olviden que, incluso así, volverá a renacer de sus cenizas.  Simple comentario por si quieren dedicarse a otras cosas más productivas los enterradores.
VIVA ANDALUCÍA LIBRE!!